jueves, 6 de diciembre de 2012

El Decamerón y otras colecciones de relatos

Chicas, chicos:

Aquí tenéis un pagüerpoint acerca del última tema del segundo bloque de Selectividad: "El Decamerón y otras colecciones de relatos". Nos sirve para completar el tema, además de que desde él podéis acceder a distintos textos que siempre viene bien conocer para empaparse más y mejor de la época.

domingo, 25 de noviembre de 2012

La poesía de los goliardos

Como ya hemos visto en clase, con el término goliardo se denomina a los clérigos y estudiantes universitarios de sólida formación intelectual que, entre los siglos XI y XIII, compusieron poemas líricos en los que abandonaban la erudición para centrarse en el canto a los placeres.

Aunque la etimología de la palabra es incierta, parece que proviene del bajo latín gens Goliae, literalmente «gente del demonio». También podría proceder de «gula» por aproximación fonética.

La poesía de los goliardos se ha conservado en distintos cancioneros, como el Carmina Burana, y reúnen textos de diversos autores y abordan dos temas principales: por un lado, el más habitual, la referencia autobiográfica a su vida amorosa, por donde corre el vino y domina la diversión placentera; y por otro, el ataque a las instituciones religiosas, donde se denuncia la hipocresía y la corrupción eclesiástica. Es por ello que fueron duramente condenados por los distintos concilios que se hacían de la Iglesia.

He hablado del Carmina Burana. Traducidos como Cantos de Beuren a causa del nombre con el que Johann Andreas Schmeller publicó en 1847 la primera edición del manuscrito de la obra. Los poemas goliardescos que integran esta colección se sabe que fueron reunidos hacia 1225 y encontrados en el monasterio de Benediktbeuren en Baviera, región alemana ubicada entre los Alpes y la frontera con Chequia. Los poemas están en lenguas latina y bajo-alemán y en esta página podéis leer aquellos que Carl Orff seleccionó para su conocida obra Carmina Burana, donde se acompaña la traducción al español.

Estas veinticinco piezas componen la obra Carmina Burana, del compositor alemán Carl Orff (1895-1982). Compuesta entre 1935 y 1936, fue estrenada el 8 de julio de 1937. A continuación os dejo con la obra completa, interpretada por la UC Davis Symphony Orchestra, dirigida por Kern Holoman. La parte más conocida es la primera parte del preludio, O Fortuna, pero la obra completa es una maravilla.



Hay constancia de poesía goliardesca en buena parte de Europa (Inglaterra, Francia, Alemania, Italia...). En España fueron llamados sopistas (quizá porque buscaban un plato de sopa), estudiantes sin recursos que aparecen en el siglo XII con las primeras universidades, y que derivaron en la tuna.

Como comenté en clase, mucho ha cambiado la tuna desde esos años hasta la actualidad. Si antes eran un modo de costearse los estudios y conseguir un plato de comida u hospedaje, hoy en día son agrupaciones musicales que se forman en torno a ciertas facultades universitarias y que, en ocasiones, reúnen a antiguos estudiantes como una forma de no perder el contacto. Para acabar, para el que no conozca lo que no es una tuna, aquí tenéis una interpretación de la tuna de la Universidad de Salamanca, actuando en plena plaza.

domingo, 11 de noviembre de 2012

Edipo rey

Lo prometido es deuda. Antes de ver la película, que nos ayudará a comprender mejor (o ver desde otra perspectiva) la tragedia original, me gustaría que leyerais estas líneas de Joaquín Juan Penalva, poeta, crítico literario y profesor también de Literatura Universal (además de paisano mío). Están sacadas de El Espectador imaginario, una revista digital que preparan los profesores y alumnos del Máster en Crítica Cinematográfica que organiza Aula Crítica.


Edipo rey

Edipo re. Pier Paolo Pasolini, Italia-Marruecos, 1967

Por Joaquín Juan Penalva

Edipo rey cartelPier Paolo Pasolini es uno de los directores más atípicos, no solo del cine italiano, sino de toda la historia del séptimo arte. Cuando rodó su primera película, de corte neorrealista, Accattone (1961), ya era un intelectual muy conocido en su país, donde había destacado fundamentalmente como poeta, pero enseguida se ganó un lugar de privilegio en la cinematografía merced a sus trasposiciones literarias. Deslumbró a todos con El evangelio según San Mateo (Il vangelo secondo Matteo, 1964) y reinterpretó el espíritu de la tragedia clásica en títulos como Edipo rey (Edipo re, 1967) y Medea (1969). Logró gran repercusión y reconocimiento con sus versiones de El Decamerón (Il Decameron, 1971), Los cuentos de Canterbury (I racconti di Canterbury, 1972) y Las mil y una noches (Il fiore delle mille e una notte, 1974), conocidas como la Trilogía de la Vida; y, por último, ofreció una dura crítica al fascismo y al capitalismo en Salò o los 120 días de Sodoma (Salò o le 120 giornate di Sodoma, 1975), su película póstuma, estrenada poco después de su asesinato en la playa de Ostia.

Edipo rey fotogramaLa historia de Edipo, el personaje central del mito de Tebas, le vino muy bien a Pasolini para filmar una película directa y desnuda, donde planteaba algunas de las cuestiones fundamentales para el ser humano. Y es que, no en vano, la tragedia de Sófocles, desde que el propio Aristóteles la situara como una de las cumbres del teatro griego en su Poética, ha sido uno de los más indiscutibles clásicos de la literatura universal. Pasolini no se ha limitado a trasponer la tragedia, sino que ha contado en la pantalla toda la vida de Edipo, desde su nacimiento en Tebas hasta su exilio al descubrir que, en realidad, él era la auténtica mancha humana -miasma choras- que había provocado la ira de de los dioses.

Edipo rey fotogramaEdipo rey, en la versión sofoclea del mito, presentaba la primera investigación policial de la literatura occidental, con el atractivo de que el detective que pretendía resolver el crimen (Edipo, rey de Tebas) acababa descubriendo que el asesino de Layo, el anterior rey, era él mismo. Y no solo eso, sino que pronto descubriría también que Layo era su padre, y que él se había casado y tenido hijos con su madre. Lo curioso es que todo eso se lo comunicaba Tiresias al comienzo de la obra -"Saldrá a la luz que ha convivido con sus hijos como hermano y padre, el mismo hombre, que de la mujer que le engendró es hijo y esposo, que ha sembrado donde sembró su padre y es su asesino"-, aunque Edipo era incapaz de verlo, porque él, que pudo resolver el enigma de la Esfinge, no conseguía ver la verdad que tenía ante sus ojos. Esa ceguera metafórica se convertirá en literal cuando Edipo se vacíe los ojos al final de la tragedia.

Edipo rey fotogramaEn el Edipo rey de Pasolini, resulta inevitable referirse al complejo de Edipo formulado por Sigmund Freud. Pasolini consigue unir el mito clásico con el psicoanálisis en una apuesta arriesgada que mezcla dos épocas distintas. Edipo nace en el seno de una familia acomodada de Bolonia durante la década del veinte, en pleno auge del fascismo, pero es abandonado en el monte Citerón en una época que corresponde a la de la Antigua Grecia. Solo al final de la película, Edipo, ya exiliado, regresará a la Bolonia de mediados de los sesenta, al mismo lugar que le vio nacer, aunque él ya no pueda contemplar con sus ojos ese regreso al origen, al vientre materno.

Edipo rey fotogramaAl cabo, lo que plantea Pasolini es lo mismo que planteaba Sófocles: la búsqueda de la verdad, la fragilidad de todo lo humano y la inexorabilidad de un destino cruel. Resulta curioso que se haya dicho de Edipo rey que es la película más autobiográfica de Pasolini, pero lo cierto es que podemos descubrir en ella muchas de sus obsesiones, aun siendo una fiel trasposición de la tragedia de Sófocles. En el reparto, nada queda al azar; Pasolini eligió a Franco Citti para el papel de Edipo, y, aunque recibió duras críticas en el momento de su estreno, su interpretación, algo afectada, se ajusta bien a un personaje que, eventualmente, tiene accesos de ira, es "hijo de la fortuna" y se convierte en un juguete en manos del destino. Resultó genial la elección de Silvana Mangano, un auténtico icono sexual, para el papel de Yocasta; de hecho, una de las grandes secuencias de Edipo rey es cuando, al dar de mamar a Edipo, Yocasta, en un largo primer plano, ve pasar por delante su siniestro futuro. El reparto lo completan Alida Valli (Mérope, reina de Corinto y madre adoptiva de Edipo), Julian Beck (Tiresias) y Carmelo Bene (Creonte).

Edipo rey fotogramaPasolini trata de subrayar el primitivismo de la obra mediante el empleo de intertítulos que recuerdan al cine silente, y logra crear una atmósfera inquietante con el empleo de músicas diversas: Bach y Mozart, el himno soviético, melodías populares de Japón, Rumanía, Marruecos... La primera mitad del metraje relata la historia de Edipo desde su nacimiento hasta que se convierte en rey de Tebas -lo hace por méritos propios, al derrotar a la Esfinge, y es, por tanto, un tyrannos, aunque después descubriremos que era también un basileus, el legítimo heredero de la corona de Layo-, mientras que la segunda se inicia con la plaga de peste que azota la ciudad. Al rodar en Marruecos, el director logró distanciarse del mundo griego clásico, recreando una Tebas mucho más próxima a la Micenas de Agamenón que a la Atenas de Pericles.

El mito de Edipo sigue estando vivo en nuestra cultura: en la pintura, en la ópera y también en el cine, donde se percibe su huella en títulos tan dispares como Recuerda (Spellbound, Alfred Hitchcock, 1945), El enigma de Gaspar Hauser (Jeder für sich und Gott gegen alle, Werner Herzog, 1974)Blade Runner (Ridley Scott, 1982) e incluso Desafío total (Total Recall, Paul Verhoeven, 1990). En su trasposición, Pasolini ha logrado una aproximación muy personal sin renunciar por ello al mito. Hay una frase que resume muy bien la película, pero también la propia existencia de Pasolini. Se la dice la Esfinge, justo antes de morir, a Edipo: "Es inútil, el abismo al que tratas de arrojarme está dentro de ti".

Premios: Nominada al León de Oro en el Festival de Cine de Venecia 

jueves, 8 de noviembre de 2012

La poesía de los trovadores

Aquí tenéis un esquema para comprender mejor y completar el tema de La poesía de los trovadores de cara a selectividad, bien la tengáis este año o el año próximo.


lunes, 5 de noviembre de 2012

Una visita al teatro

Esta mañana hemos asistido, en el colegio Don Bosco Salesianos de Alicante, a la representación de Luces de bohemia, obra que inaugura el llamado género esperpento, creado y descrito aquí por Ramón María del Valle-Inclán. Se publicó en los años 20 del pasado siglo, aunque no se representó por primera vez hasta 1970.

Por lo tanto, y a pesar de que hemos podido ver una adaptación reducida de la pieza teatral, es importante este tipo de actividades extraescolares que, por un lado, refuerzan el texto leído y trabajado en clase y, por otro, nos ponen en el contexto de un teatro.

Aquí tenéis algunas fotos de la actividad de esta mañana.








jueves, 25 de octubre de 2012

Catulo y el tópico del basia mille

A pesar de que hay un apartado en el libro de texto dedicado al poeta latino Catulo (84-54 a. C.) me gustaría compartir algunos detalles.

Como sabéis, Catulo es el máximo representante de la poesía del yo, aquella que explora la intimidad del artista mostrándola al lector a través de sus relaciones personales, ya sea en un entorno real o ideal. Inspirado por la poeta griega Safo (a la que ya estudiamos dentro de la lírica personal de Grecia), Catulo explora y profundiza en algo que todos los poetas posteriores a él utilizan: la invención de la amada como tema del poema. La relación amorosa no tiene por qué ser real; en ocasiones, y ejemplos hay cientos, la excusa de la amada da pie para hablar acerca del amor. Otras veces, por el contrario, hacer poemas sobre el amor sirve al poeta para ocultar sus emociones o la persona a la que van dedicados esos versos.

Pero en Catulo, como vimos en clase, también se encuentran ejemplos de lo que conocemos como poesía del tú y poesía del nosotros. Catulo tiene poemas soeces de crítica, de burla, de sátira, rozando el insulto personal a veces; y también poemas sobre mitología, extensos poemas en los que se dan cita leyendas y mitos.

No obstante, Catulo ha pasado a la historia por su poesía amorosa. Uno de sus poemas más conocidos y estudiados es el número 5, que dice así:

Vivamos, querida Lesbia, y amémonos,
y las habladurías de los viejos puritanos
nos importen todas un bledo.
Los soles pueden salir y ponerse;
nosotros, tan pronto acabe nuestra efímera vida,
tendremos que vivir una noche sin fin.
Dame mil besos, después cien,
luego otros mil, luego otros cien,
después hasta dos mil, después otra vez cien;
luego, cuando lleguemos a muchos miles,
perderemos la cuenta para ignorarla
y para que ningún malvado pueda dañarnos,
cuando se entere del total de nuestros besos.

Un poema precioso, que inaugura, como dice el título de esta entrada, el tópico literario del basia mille. El poeta, enamorado, dirige a su amada Lesbia, estos versos en los que sueña desbordarla y ser desbordado por miles y miles de besos, tantos que la cuenta se pierda, que nadie pueda seguirla, que quien espíe ese amor (quizá prohibido, como luego será el amor de toda la poesía trovadoresca) enloquezca al saber el total de los besos dados y recibidos. La pasión amorosa en Catulo sobrepasa cualquier límite.

Nuestro poeta, como después harán otros muchos, centra en Lesbia (aunque a veces también en Juvencio) sus poemas de amor. Sea Lesbia en Catulo, o Laura en Petrarca, Beatriz en Dante o Elisa en Garcilaso de la Vega, esa figura femenina muchas veces es una idea del amor, que el poeta visualiza en una amada en concreto, musa para toda su poesía.

Pero volvamos a ese poema 5. Los últimos siete versos suenan así, en latín original:


…Da mi basia mille, deinde centum,
dein mille altera, dein secunda centum,
deinde usque altera mille, deinde centum.
dein, cum milia multa fecerimus,
conturbabimus illa, ne sciamus,
aut ne quis malus inuidere possit
cum tantum sciat esse bassiorum

Ahí tenemos el tópico literario del basia mille. La traducción que tenemos arriba pertenece a la editorial Alianza. La Poesía completa de Catulo la podemos leer (en edición bilingüe) en la editorial Hiperión.



Una edición muy recomendable, como todas las que hace Hiperión. Juan Manuel Rodríguez Tobal nos traduce así esos últimos versos:


…Pero dame mil besos, luego ciento,
después mil otra vez, de nuevo ciento,
luego otros mil aún, y luego ciento…
Después, cuando sumemos muchos miles,
confundamos la cuenta hasta perderla,
que hechizarnos no pueda el envidioso
al saber el total de nuestros besos

Como se puede ver es algo diferente a la de la editorial Alianza. Y es que, como dice una máxima italiana, tradurre è tradire, traducir es traicionar. Y si no, fijaos en la ¿traducción? que Cristóbal de Castillejo (1490-1550), en pleno Renacimiento español, hizo del poema de Catulo.

Dame, Amor, besos sin cuento,
asido de mis cabellos,
y mil y ciento tras ellos,
y tras ellos mil y ciento,
y después
de muchos millares, tres;
y porque nadie lo sienta
desbaratemos la cuenta
y contemos al revés.

La traducción se ha convertido en toda una versión libre. Y, a pesar de que aparezca el tópico del basia mille, el destinatario no es una mujer en concreto, sino el Amor en general. Aquel Lesbia del verso original se ha diluido y se ha transformado en toda una idea del asunto amoroso.

Así es como los temas, los poemas y los poetas se vuelven universales.

martes, 23 de octubre de 2012

Dudas ortográficas

Antes de nada ved este vídeo.

 

Como habéis podido comprobar, únicamente aparecen las veintisiete letras del español al son de la música Asturias, una obra de Isaac Albéniz para piano perteneciente a la Suite española nº 1, op. 47, en este caso en arreglo para guitarra clásica interpretada por Narciso Yepes.

Al final del vídeo veréis que el vídeo está sacado de la página web: www.alphabeto.es, un interesante sitio creado por Víctor Gutiérrez de Tena en el que podéis aclarar errores comunes (y a veces recurrentes) en castellano.

Os animo a descubrirlo.

lunes, 22 de octubre de 2012

Los grados del adjetivo

Como hemos visto esta mañana, un adjetivo se nos presenta en tres grados distintos: positivo, comparativo y superlativo. Además de los ejercicios de clase, podéis practicar más en esta página: www.aplicaciones.info

En esa página encontraréis algunos ejercicios sobre los grados del adjetivo. Es autocorrectivo, así que podéis ver cómo lo habéis hecho al instante. También tiene la teoría, por lo que podéis repasar sin necesidad de sacar el libro o tener el libro delante.

Y, por último, recordad: algunos adjetivos, como bueno, malo, grande o pequeño (hay más, pero de momento, en 1º de ESO, vamos a dar esos cuatro únicamente) solo tienen una forma para el comparativo y otra para el superlativo.

En el examen del lunes que viene entran los grados del adjetivo, y seguro que las excepciones caen... ¡Ánimo y a estudiar, chicos!

domingo, 21 de octubre de 2012

La épica medieval

Aquí os dejo un interesante documento sobre el tema de la épica medieval que nos puede servir de apoyo para estudiar el tema o como esquema para repasarlo.

domingo, 14 de octubre de 2012

Poemas de Safo

Como dijimos en clase, Safo pertenece al período arcaico de la literatura griega, en torno al siglo VII a. C. Enmarcada dentro de la lírica personal, las características principales de su poesía (que conocemos gracias a fragmentos o citas tardías) es la sentimentalidad volcada en los versos. Ya no estamos frente a la sobriedad en el lenguaje y la métrica que vimos en la Ilíada o la Odisea homéricas. Aquí los versos son más breves, la métrica no es igual en toda la estrofa y la temática es más intimista.

Os dejo algunos poemas de Safo, la poeta que después inspiraría a Catulo y, a través de la tradición romana, a toda la literatura posterior. Y eso a pesar de que de los nueve libros de poesías que escribió, únicamente nos han llegado algunos fragmentos y dos poemas completos.


Me parece el igual de un dios, el hombre
que frente a ti se sienta, y tan de cerca
te escucha absorto hablarte con dulzura
y reírte con amor.

Eso, no miento, no, me sobresalta
dentro del pecho el corazón; pues
te miro un solo instante, ya no puedo
decir ni una palabra,

la lengua se me hiela, y un sutil
fuego no tarda en recorrer mi piel,
mis ojos no ven nada, y el oído
me zumba, y un sudor

frío me cubre, y un temblor me agita
todo el cuerpo, y estoy, más que la hierba,
pálida, y siento que me falta poco
para quedarme muerta.



Morirás, bella joven;
ni servirá ser bella,
ni quedará memoria
de ti sobre la tierra,
porque las frescas rosas
no has gozado de Pieria:
y así desconocida
irás a las cavernas
del horroroso Dite,
ni será quien te vea
cuando en las vanas sombras
des fugitivas vueltas.



Amor bulle en mi pecho
y sin cesar voltea
mi corazón amante
y acá y allá le lleva;
mis miembros desenlaza
su poderosa diestra,
y en viéndome rendido
ya me desprecia y vuela;
tiene sus lindas alas
cual ave, mas es fiera,
y dulce y apacible,
y de indomable fuerza.
Atis, de tu abandono
al crudo Amor te queja,
que en los ojos me abrasa
de Andrómeda la bella.



De los verdes manzanos
en las frondosas cimas,
con estruendoso ruido
las aguas se deslizan,
las puras frescas aguas
que el peñasco destila;
el delicioso estruendo
de las hojas movidas
del apacible viento
süave sueño inspira
y con Venus hermosa
soñaba que dormía;
mas de las altas ramas,
del viento sacudida,
una roja manzana
de mi sueño me priva.

lunes, 8 de octubre de 2012

Las flores póstumas de Baudelaire

Aunque estudiemos la vida y la obra de Charles Baudelaire (máximo representante del Simbolismo) más adelante, ya hacia final de curso, he encontrado esta noticia en El País de hoy. Podéis leer el original aquí o bien en este blog.

ELSA FERNÁNDEZ-SANTOS. Acorralado por la penosa enfermedad que cercenó su vida, el poeta maldito por excelencia, el hombre que se elevó sobre la vida y entendió sin esfuerzo “el lenguaje de las flores y de las cosas mudas”, llenó su larga agonía de coléricas notas. “De niño tuve en mi corazón dos sentimientos contradictorios, el horror de la vida y el éxtasis de la vida. Es el sello de un holgazán enfermo de nervios”, escribió Charles Baudelaire (1821-1867) en estos Fragmentos póstumos que ahora publica la editorial Sexto Piso. Un volumen que reúne por primera vez todas las notas en prosa finales y también todos los dibujos del autor de Las flores del mal.


“En Francia se ha publicado parte de estos fragmentos, pero siempre en libros en los que muchas de las notas se habían descartado. Las ediciones españolas siempre eran traducciones directas de esas ediciones francesas. En este libro, sin embargo, hemos trabajado directamente sobre los originales. Están todos. No existe, ni siquiera en francés, un libro de estas características”, afirma el escritor mexicano Ernesto Kavi, encargado de la investigación y recopilación que contiene el volumen.

Las notas originales se encuentran repartidas entre la Biblioteca Nacional de Francia, la Biblioteca Jacques Doucet y dispersas en colecciones privadas. “Otro tanto ocurre con los dibujos”, explica Kavi. “La Biblioteca de la ciudad de París posee cuatro y es la que más tiene. El resto está desperdigado en manos de particulares”.

Tras su muerte en una clínica de París, la madre de Baudelaire recogió uno a uno los papeles de su hijo, pequeñas hojas arrancadas de cuadernos en las que anotaba, en lápiz y a pluma, lo que él mismo llamó “proyectiles”, junto a páginas dedicadas a pensamientos, aforismos, listas y proyectos. Madame Aupick se las entregó a su editor, Auguste Poulet-Malassis, el único que podía encontrar algún sentido en aquel caos. Malassis los ordenó y es esa la ruta que ahora se ha seguido. Los dibujos, la mayoría en manos de sus amigos, también fueron recogidos por el editor en un cuaderno. Vivieron una azarosa vida. Fueron publicados y reunidos, pero en 1988 salieron a subasta y se volvieron a dispersar.

Los pensamientos de Baudelaire muestran la rabia, cólera y tristeza de un hombre rodeado por la enfermedad y el exilio. Su caligrafía es desordenada. Pero, lejos del tópico del poeta embriagado y mujeriego, surge el hombre preocupado por el futuro. “Para él, el trabajo era una tortura, pero no hacía más que trabajar, le preocupaban su gloria como poeta y el dinero. Las notas son un fiel reflejo de esa batalla interior entre el desorden de su vida y su pensamiento y el orden que quiere imponerse para ser un gran artista”.

El 23 de enero de 1862, el poeta escribe: “En lo moral, como en lo físico, siempre he tenido la sensación de un abismo, no solo el abismo del sueño, sino el abismo de la acción, de la ensoñación, del recuerdo, del deseo, del arrepentimiento, del remordimiento, de la belleza, del número… He cultivado mi histeria con placer y con terror. Siempre tengo vértigo y hoy he sufrido una singular advertencia, he sentido pasar sobre mí el viento del ala de la imbecilidad”.

Baudelaire reflexiona una y otra vez sobre las tareas del escritor, sobre la inspiración y el tiempo. Anota que el placer desgasta, pero el trabajo fortifica. El coraje del escritor, el destino, la concentración frente a la dispersión. El poeta zarandea sus obsesiones. “Sería dulce, quizá, ser, alternativamente, víctima y verdugo”, apunta. Surge su profundo y estrecho sentido de lo sagrado: “Si la religión desapareciera de este mundo, volveríamos a encontrarla en el corazón del ateo”.

En La Folie Baudelaire (Anagrama), Roberto Calasso ofrece un consejo que bien vale para el libro que ahora se edita: “Para quien está rodeado y atormentado por la desolación y el agotamiento es difícil encontrar algo mejor que una página de Baudelaire. Prosa, poesía, poemillas en prosa, cartas, fragmentos: todo sirve”. Quizá basta para ilustrar las palabras del escritor florentino un fragmento perteneciente a uno de los manuscritos menos conocidos, que catalogado bajo la letra D está custodiado por la Biblioteca Literaria de Jacques Doucet. La lucidez del poeta maldito solo puede provocar hoy un fatal escalofrío acompañado de un aliento de esperanza: “Síntomas de ruina. Construcciones inmensas. Uno sobre otro, demasiados apartamentos, habitaciones, templos, galerías, escaleras, desembocaduras, belvederes, farolas, fuentes, estatuas. —Fisuras, grietas. Humedad que proviene de un contenedor situado cerca del cielo—. ¿Cómo advertir a las personas, a las naciones?, advertimos, al oído, a los más inteligentes”


Baudelaire es un gran poeta. Sus poemas son difíciles, muy enrevesados, pero sabremos dar con la clave para entenderlos y desmenuzar el alma que habitaba entre esas líneas.

viernes, 5 de octubre de 2012

Ítaca, de Kavafis

Hace unos días os colgué en el blog el poema Troyanos, de Constantino Kavafis. Lo trabajamos en clase. Lo prometido es deuda: a pesar de que ya lo hemos leído y trabajado, la poesía que siguie me parece excepcional para descubrir la Odisea de Homero desde una perspectiva mas actual. Nosotros ya sabemos qué significan esas Ítacas. Espero que lleguen a la suya igual que Ulises: cargados de experiencias y buenos ratos.

Para terminar la entrada tenéis la canción Viatge a Ítaca, que Lluís Llach compuso a partir de la traducción en catalán por parte de Carles Riba del poema de Kavafis.

ÍTACA

Cuando emprendas tu viaje a Ítaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colérico Poseidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino,
si tu pensar es elevado, si selecta
es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Poseidón encontrarás,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no los yergue tu alma ante ti.

Pide que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos nunca vistos antes.
Detente en los emporios de Fenicia
y hazte con hermosas mercancías,
nácar y coral, ámbar y ébano
y toda suerte de perfumes sensuales,
cuantos más abundantes perfumes sensuales puedas.
Ve a muchas ciudades egipcias
a aprender, a aprender de sus sabios.

Ten siempre a Ítaca en tu mente.
Llegar allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje.
Mejor que dure muchos años
y atracar, viejo ya, en la isla,
enriquecido de cuanto ganaste en el camino
sin aguantar a que Ítaca te enriquezca.

Ítaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Ítaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Ítacas.

martes, 2 de octubre de 2012

Troyanos, de Kavafis

Comparto con vosotros un poema de Constantino Kavafis (1863-1933), poeta griego, responsable del renacimiento de la literatura escrita en griego. Aunque uno de sus poemas más conocidos es Ítaca, que está en el libro y que ya trabajaremos, ahora os presento el poema Troyanos, cuyo contenido hemos de buscarlo en la Ilíada de Homero.



TROYANOS

Son los esfuerzos nuestros, de los desventurados,
son los esfuerzos nuestros como los de los troyanos.
Algo conseguimos; nos reponemos
un poco; y empezamos
a tener coraje y buenas esperanzas.
Pero siempre algo surge y nos detiene.
Aquiles en el foso enfrente de nosotros
sale y con grandes voces nos espanta.
Son los esfuerzos nuestros como los de los troyanos.
Creemos que con decisión y audacia
cambiaremos la animosidad de la suerte,
y nos quedamos afuera para combatir.
Mas cuando sobreviene la gran crisis,
nuestra audacia y decisión desaparecen;
se turba nuestra alma, se paraliza;
y alrededor de los muros corremos
buscando salvarnos con la fuga.
Empero nuestra caída es cierta. Arriba,
sobre las murallas, comenzó ya el lamento.
Lloran sentimientos y recuerdos de nuestros días.
Amargamente por nosotros Príamo y Hécuba lloran.

Como veis, no solo habla del mito de la guerra de Troya. Tiene un sentido mucho más profundo. ¿Qué significan estos versos de Kavafis para vosotros?
Queridos alumn@s,

os presento este nuevo espacio dedicado única y exclusivamente a vosotros.

Entiendo que este curso os encontraréis llenos de agobios y tensiones, pero no os olvidéis de disfrutar  este momento y esta etapa de vuestra vida, que siempre la recordaréis con una sonrisa...os lo aseguro!!

Tened en cuenta estas palabras de Antonio Machado; no solo ahora, sino siempre:

 

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.



lunes, 1 de octubre de 2012

El combate final

Estamos comentando un fragmento del diálogo entre Príamo y Aquiles, ya al final de la Ilíada. Antes de eso tuvo lugar el combate entre Héctor, hijo de Príamo, y Aquiles, en el canto XXII. Aquí lo tenéis:

188 En tanto, el veloz Aquiles perseguía y estrechaba sin cesar a Héctor. Como el perro va en el monte por valles y cuestas tras el cervatillo que levantó de la cama, y si este se esconde, azorado, debajo de los arbustos, corre aquel rastreando hasta que nuevamente lo descubre; de la misma manera, el Pelida, de pies ligeros, no perdía de vista a Héctor. Cuantas veces el troyano intentaba encaminarse a las puertas Dardanias, al pie de las torres bien construidas, por si desde arriba le socorrían disparando flechas, otras tantas Aquiles, adelantándosele, le apartaba hacia la llanura, y aquel volaba sin descanso cerca de la ciudad. Como en sueños ni el que persigue puede alcanzar al perseguido, ni este huir de aquel; de igual manera, ni Aquiles con sus pies podía dar alcance a Héctor, ni Héctor escapar de Aquiles. ¿Y cómo Héctor se hubiera librado entonces de la muerte que le estaba destinada si Apolo, acercándosele por la postrera y última vez, no le hubiese dado fuerzas y agilitado sus rodillas?

205 El divino Aquiles hacía con la cabeza señales negativas a los guerreros, no permitiéndoles disparar amargas flechas contra Héctor: no fuera que alguien alcanzara la gloria de herir al caudillo y él llegase el segundo. Mas cuando en la cuarta vuelta llegaron a los manantiales, el padre Zeus tomó la balanza de oro, puso en la misma dos suertes —la de Aquiles y la de Héctor domador de caballos— para saber a quién estaba reservada la dolorosa muerte; cogió por el medio la balanza, la desplegó, y tuvo más peso el día fatal de Héctor que descendió hasta el Hades. Al instante Febo Apolo desamparó al troyano. Atenea, la diosa de los brillantes ojos se acercó al Pelida, y le dijo estas aladas palabras:

216 Espero, oh esclarecido Aquiles, caro a Zeus, que nosotros dos proporcionaremos a los aqueos inmensa gloria, pues al volver a las naves habremos muerto a Héctor, aunque sea infatigable en la batalla. Ya no se nos puede escapar, por más cosas que haga el flechador Apolo, postrándose a los pies del padre Zeus, que lleva la égida. Párate y respira; e iré a persuadir a Héctor para que luche contigo frente a frente.

224 Así habló Atenea. Aquiles obedeció, con el corazón alegre, y se detuvo enseguida, apoyándose en el arrimo de la pica de asta de fresno y broncínea punta. La diosa dejóle y fue a encontrar al divino Héctor. Y tomando la figura y la voz infatigable de Deífobo, llegóse al héroe y pronunció estas aladas palabras:

229 —¡Mi buen hermano! Mucho te estrecha el veloz Aquiles, persiguiéndote con ligero pie alrededor de la ciudad de Príamo. Ea, detengámonos y rechacemos su ataque.

232 Respondióle el gran Héctor de tremolante casco: —¡Deífobo! Siempre has sido para mí el hermano predilecto entre cuantos somos hijos de Hécabe y de Príamo; pero desde ahora me propongo tenerte en mayor aprecio, porque al verme con tus ojos osaste salir del muro y los demás han permanecido dentro.

238 Contestó Atenea, la diosa de los brillantes ojos: —¡Mi buen hermano! El padre, la venerable madre y los amigos abrazábanme las rodillas y me suplicaban que me quedara con ellos —¡de tal modo tiemblan todos!— pero mi ánimo se sentía atormentado por grave pesar. Ahora peleemos con brío y sin dar reposo a la pica, para que veamos si Aquiles nos mata y se lleva nuestros sangrientos despojos a las cóncavas naves o sucumbe vencido por tu lanza.

247 Así diciendo, Atenea, para engañarle, empezó a caminar. Cuando ambos guerreros se hallaron frente a frente, dijo el primero el gran Héctor, de tremolante casco:

250 —No huiré más de ti, oh hijo de Peleo, como hasta ahora. Tres veces di la vuelta, huyendo, en torno de la gran ciudad de Príamo, sin atreverme nunca a esperar tu acometida. Mas ya mi ánimo me impele a afrontarte ora te mate, ora me mates tu. Ea pongamos a los dioses por testigos, que serán los mejores y los que más cuidarán de que se cumplan nuestros pactos: Yo no te insultaré cruelmente, si Zeus me concede la victoria y logro quitarte la vida; pues tan luego como te haya despojado de las magníficas armas, oh Aquiles, entregaré el cadáver a los aqueos. Obra tú conmigo de la misma manera.

260 Mirándole con torva faz, respondió Aquiles, el de los pies ligeros: — ¡Héctor, a quien no puedo olvidar! No me hables de convenios. Como no es posible que haya fieles alianzas entre los leones y los hombres, ni que estén de acuerdo los lobos y los corderos, sino que piensan continuamente en causarse daño unos a otros; tampoco puede haber entre nosotros ni amistad ni pactos, hasta que caiga uno de los dos y sacie de sangre a Ares, infatigable combatiente. Revístete de toda clase de valor, porque ahora te es muy preciso obrar como belicoso y esforzado campeón. Ya no te puedes escapar. Palas Atenea te hará sucumbir pronto, herido por mi lanza, y pagarás todos juntos los dolores de mis amigos, a quienes mataste cuando manejabas furiosamente la pica.

273 En diciendo esto, blandió y arrojó la fornida lanza. El esclarecido Héctor, al verla venir, se inclinó para evitar el golpe: clavóse aquella en el suelo, y Palas Atenea la arrancó y devolvió a Aquiles, sin que Héctor, pastor de hombres, lo advirtiese. Y Héctor dijo al eximio Pelida:

279 —¡Erraste el golpe, deiforme Aquiles! Nada te había revelado Zeus acerca de mi destino como afirmabas: has sido un hábil forjador de engañosas palabras, para que, temiéndote, me olvidara de mi valor y de mi fuerza. Pero no me clavarás la pica en la espalda, huyendo de ti: atraviésame el pecho cuando animoso y frente a frente te acometa, si un dios te lo permite. Y ahora guárdate de mi broncínea lanza. ¡Ojalá que todo su hierro se escondiera en tu cuerpo! La guerra sería más liviana para los teucros si tú murieses, porque eres su mayor azote.

289 Así habló; y blandiendo la ingente lanza, despidióla sin errar el tiro; pues dio un bote en el escudo del Pelida. Pero la lanza fue rechazada por la rodela, y Héctor se irritó al ver que aquella había sido arrojada inútilmente por su brazo; paróse, bajando la cabeza pues no tenía otra lanza de fresno y con recia voz llamó a Deífobo, el de luciente escudo, y le pidió una larga pica. Deífobo ya no estaba a su vera. Entonces Héctor comprendiólo todo, y exclamó:

297 —¡Oh! Ya los dioses me llaman a la muerte. Creía que el héroe Deífobo se hallaba conmigo, pero está dentro del muro, y fue Atenea quien me engañó. Cercana tengo la perniciosa muerte, que ni tardará ni puedo evitarla. Así les habrá placido que sea, desde hace tiempo, a Zeus y a su hijo, el Flechador; los cuales, benévolos para conmigo, me salvaban de los peligros. Cumplióse mi destino. Pero no quisiera morir cobardemente y sin gloria; sino realizando algo grande que llegara a conocimiento de los venideros.

306 Esto dicho, desenvainó la aguda espada, grande y fuerte, que llevaba al costado. Y encogiéndose, se arrojó como el águila de alto vuelo se lanza a la llanura, atravesando las pardas nubes, para arrebatar la tierna corderilla o la tímida liebre; de igual manera arremetió Héctor blandiendo la aguda espada. Aquiles embistióle, a su vez, con el corazón rebosante de feroz cólera: defendía su pecho con el magnífico escudo labrado, y movía el luciente casco de cuatro abolladuras, haciendo ondear las bellas y abundantes crines de oro que Hefesto colocara en la cimera. Como el Véspero, que es el lucero más hermoso de cuantos hay en el cielo, se presenta rodeado de estrellas en la obscuridad de la noche; de tal modo brillaba la pica de larga punta que en su diestra blandía Aquiles, mientras pensaba en causar daño al divino Héctor y miraba cuál parte del hermoso cuerpo del héroe ofrecería menos resistencia. Este lo tenía protegido por la excelente armadura que quitó a Patroclo después de matarle, y solo quedaba descubierto el lugar en que las clavículas separan el cuello de los hombros, la garganta, que es el sitio por donde más pronto sale el alma: por allí el divino Aquiles envasóle la pica a Héctor, que ya le atacaba, y la punta, atravesando el delicado cuello, asomó por la nuca. Pero no le cortó el garguero con la pica de fresno que el bronce hacia ponderosa, para que pudiera hablar algo y responderle. Héctor cayó en el polvo, y el divino Aquiles se jactó del triunfo, diciendo:

331 —¡Héctor! Cuando despojabas el cadáver de Patroclo, sin duda te creíste salvado y no me temiste a mí porque me hallaba ausente. ¡Necio! Quedaba yo como vengador, mucho más fuerte que él, en las cóncavas naves, y te he quebrado las rodillas. A ti los perros y las aves te despedazarán ignominiosamente, y a Patroclo los aqueos le harán honras fúnebres.

337 Con lánguida voz respondióle Héctor, el de tremolante casco: —Te lo ruego por tu alma, por tus rodillas y por tus padres: ¡No permitas que los perros me despedacen y devoren junto a las naves aqueas! Acepta el bronce y el oro que en abundancia te darán mi padre y mi veneranda madre, y entrega a los míos el cadáver para que lo lleven a mi casa, y los troyanos y sus esposas lo pongan en la pira.

344 Mirándole con torva faz, le contestó Aquiles, el de los pies ligeros: —No me supliques, ¡perro!, por mis rodillas ni por mis padres. Ojalá el furor y el coraje me incitaran a cortar tus carnes y a comérmelas crudas. ¡Tales agravios me has inferido! Nadie podrá apartar de tu cabeza a los perros, aunque me den diez o veinte veces el debido rescate y me prometan más, aunque Príamo Dardánida ordene redimirte a peso de oro; ni aun así, la veneranda madre que te dio a luz te pondrá en un lecho para llorarte, sino que los perros y las aves de rapiña destrozarán tu cuerpo.

355 Contestó, ya moribundo, Héctor, el de tremolante casco: — ¡Bien te conozco, y no era posible que te persuadiese, porque tienes en el pecho un corazón de hierro. Guárdate de que atraiga sobre ti la cólera de los dioses, el día en que Paris y Febo Apolo te harán perecer, no obstante tu valor, en las puertas Esceas.

361 Apenas acabó de hablar, la muerte le cubrió con su manto: el alma voló de los miembros y descendió al Hades, llorando su suerte, porque dejaba un cuerpo vigoroso y joven. Y el divino Aquiles le dijo, aunque muerto le viera:

365 —¡Muere! Y yo perderé la vida cuando Zeus y los demás dioses inmortales dispongan que se cumpla mi destino.

367 Dijo; arrancó del cadáver la broncínea lanza y, dejándola a un lado, quitóle de los hombros las ensangrentadas armas. Acudieron presurosos los demás aqueos, admiraron todos el continente y la arrogante figura de Héctor y ninguno dejó de herirle. Y hubo quien, contemplándole, habló así a su vecino:

373 —¡Oh dioses! Héctor es ahora mucho más blando en dejarse palpar que cuando incendió las naves con el ardiente fuego.

375 Así algunos hablaban, y acercándose le herían. El divino Aquiles, ligero de pies, tan pronto como hubo despojado el cadáver, se puso en medio de los aqueos y pronunció estas aladas palabras:

378 —¡Oh amigos, capitanes y príncipes de los argivos! Ya que los dioses nos concedieron vencer a ese guerrero que causó mucho más daño que todos los otros juntos, ea, sin dejar las armas cerquemos la ciudad para conocer cuál es el propósito de los troyanos: si abandonarán la ciudadela por haber sucumbido Héctor, o se atreverán a quedarse todavía a pesar de que este ya no existe. Mas ¿por qué en tales cosas me hace pensar el corazón? En las naves yace Patroclo muerto, insepulto y no llorado; y no le olvidaré, en tanto me halle entre los vivos y mis rodillas se muevan; y si en el Hades se olvida a los muertos, aun allí me acordaré del compañero amado. Ahora, ea, volvamos, cantando el peán, a las cóncavas naves, y llevémonos este cadáver. Hemos ganado una gran victoria: matamos al divino Héctor, a quien dentro de la ciudad los troyanos dirigían votos cual si fuese un dios.

395 Dijo; y para tratar ignominiosamente al divino Héctor, le horadó los tendones de detrás de ambos pies desde el tobillo hasta el talón; introdujo correas de piel de buey, y le ató al carro, de modo que la cabeza fuese arrastrando; luego, recogiendo la magnífica armadura, subió y picó a los caballos para que arrancaran, y estos volaron gozosos. Gran polvareda levantaba el cadáver mientras era arrastrado: la negra cabellera se esparcía por el suelo, y la cabeza, antes tan graciosa, se hundía en el polvo; porque Zeus la entregó entonces a los enemigos, para que allí, en su misma patria, la ultrajaran.

405 Así la cabeza de Héctor se manchaba de polvo. La madre, al verlo, se arrancaba los cabellos; y arrojando de sí el blanco velo, prorrumpió en tristísimos sollozos. El padre suspiraba lastimeramente, y alrededor de él y por la ciudad el pueblo gemía y se lamentaba. No parecía sino que la excelsa Ilión fuese desde su cumbre devorada por el fuego.

Leído esto, ¿reconocemos los distintos epítetos épicos que aparecen? ¿Notamos cómo se repiten algunas estructuras?

Las letras del faraón

Chicos y chicas:

He encontrado una especie de juego de palabras, parecido al crucigrama, pero en forma de pirámide. Su nombre, por eso de ser una pirámide, es Las letras del faraón. Podéis jugar desde este enlace.

Apareceréis en una página como esta:



Hacéis clic sobre Iniciar juego. Y ahora os aparecerá una pirámide en el centro con la letra inicial de la palabra a la izquierda y huecos en blanco. Así:



Como veis, las definiciones están a la derecha. Solo hay que clicar en el hueco en blanco para introducir la letra. Desde la punta de la pirámide hasta la base. Es muy fácil. Cada vez que entréis os aparecerá una nueva letra y, por tanto, un nuevo crucigrama piramidal. Yo ya he resuelto unos cuantos. Ahora os toca a vosotros.


Este ejercicio es bueno para recordar la ortografía de algunas palabras difíciles y, también, para aprender vocabulario nuevo. Si tenéis dudas acerca de alguna definición, podéis consultarles a vuestros padres.


¿Cuántos ejercicios habéis resuelto?

Anagramas 3

Seguimos con la serie de anagramas. Ahora se complica un poco la cosa. En vez de siete letras, las palabras tienen ocho letras. Más complicado. A ver si encontramos alguna.

1. MINFENOE

2. NSTOGALA

3. DUEVTNUJ

4. ACNEDIAC

5. OARNABCI

6. LAUSIQOT

7. NARDOUCE

8. RIDMEONE

9. OTRAPIAS

10. UJAEPIQE

sábado, 29 de septiembre de 2012

La Troya de Murcia

Estamos dando el tema de la epopeya en Grecia (con los poemas de la Ilíada y la Odisea de Homero) y me he encontrado con esta noticia que apareció ayer, sábado 28 de septiembre, en El País. La comparto con vosotros.

 

JACINTO ANTÓN. “Una obra pensada para el combate”. Así describen los arqueólogos de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) que la han descubierto la imponente fortificación hallada en el rico yacimiento de La Bastida (Totana, Murcia) y cuyo hallazgo fue anunciado ayer. La construcción, para la que los asombrados investigadores no ahorran superlativos, es una maravilla de la poliorcética (el arte de defender y atacar las plazas fuertes). Fue construida con gran conocimiento del asunto y espíritu rupturista hace 4.200 años, en la Edad del Bronce, y es, aseguran, única en la Europa continental. Qué diablos hacía en Murcia es algo que hay que dilucidar. Seguramente responde a un momento de cambio social y político —posiblemente la instauración de una primera estructura de tipo estatal— que requirió un aumento espectacular de la violencia.



Cuenta con muros macizos de tres metros de espesor, torres cuadradas que tendrían una altura original de siete metros, una entrada monumental y una poterna de arco apuntado que se conserva completa y que es excepcional para la época. La muralla protegía una ciudad de cuatro hectáreas situada en una colina. Los arqueólogos cuyas excavaciones están patrocinadas por la Consejería de Cultura de la Región de Murcia, el Ayuntamiento de Totana, la UAB y el Gobierno central, creen que la fortificación fue concebida por “gente con grandes conocimientos militares procedente de Oriente”, puesto que su modelo, inédito en Occidente, “remite a las antiguas civilizaciones del Mediterráneo”. En concreto, los descubridores, dirigidos por el catedrático de Prehistoria de la UAB Vicente Lull, citan —y ya me dirán si no es para ponerse a soñar— la segunda ciudad de Troya. Recordarán que existen en el yacimiento de la colina de Hisalrik (Turquía), hasta diez ciudades de Troya superpuestas. La legendaria de la Ilíada correspondería a Troya VII A. La II se sitúa entre los años 2.600 al 2.350 antes de Cristo y es contemporánea de la ciudad fortificada murciana (2.200 a. C.).

El trazado y las características de la fortificación, apuntan los entusiasmados arqueólogos, “revelan una astuta estrategia de defensa que supuso una nueva manera de combatir y la instauración de un poder violento y clasista que condicionó el desarrollo de las comunidades del resto de la Península durante siete siglos”. El hallazgo “replantea lo que se conoce sobre el origen de las desigualdades económicas y políticas de Europa, la formación del estamento militar y el papel de la violencia en la formación de tradiciones de identidad”. En La Bastida se ha encontrado también armamento innovador, como alabardas.

El descubrimiento de este impresionante sistema de fortificación reafirma que la ciudad que se ha ido excavando desde hace años en el yacimiento de la Bastida (cultura de El Argar) fue en su día “el asentamiento más avanzado de Europa en términos políticos y militares durante la Edad del Bronce, solo comparable con la civilización minoica de Creta” (la de Cnosos y la leyenda del Minotauro). Hasta el momento se han hallado seis torres en un tramo de 70 metros de muralla. El perímetro de la fortificación habría alcanzado originalmente los 300 metros. La entrada al recinto se realizaba a través de un pasadizo flanqueado por potentes muros que estaría cerrado con grandes puertas. La poterna excavada remite a la de Troya II y al mundo urbano del Próximo Oriente influido por las civilizaciones de Mesopotamia y Egipto. Los arqueólogos especulan con que ello probaría que gente llegada de Oriente después de la crisis que asoló sus regiones hace 4.300 años participó en la construcción. La innovación militar de la poterna, que permite escapar o atacar por sorpresa a los asaltantes, no fue adoptada por los hititas y los micénicos sino entre 400 y 800 años después de en Murcia.

La Bastida fue probablemente, sintetizan los arqueólogos, la ciudad más poderosa de la Europa continental durante la Edad del Bronce. En el yacimiento ya se habían encontrado entre 2008 y 2011 residencias de más de 70 metros cuadrados y una gran balsa con dique capaz de almacenar casi medio millón de litros de agua.

Podéis leer la noticia directamente desde la página web de El País. ¿Qué os parece? Ya no hace falta viajar hasta Turquía para visitar la mítica ciudad de Troya. Nosotros, aquí al lado, en Murcia, tenemos una ciudad de la misma época.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

La guerra de Troya

Lo estamos viendo en clase, pero os dejo también en el blog el documental sobre la guerra de Troya, tema principal de la Ilíada de Homero y pasaje que inicia todas las aventuras de Ulises/Odiseo durante el poema homérico de la Odisea.












Como ya os dije, la guerra de Troya tiene su origen legendario en el famoso episodio del juicio de Paris. El mismo Homero lo menciona brevemente en su Ilíada, en el último canto, el XXIV, entre los versos 25 y 30:
A todos los demás les placía eso, pero no a Hera

ni a Posidón ni a la ojizarca doncella, que persistían

como desde el principio en su odio contra la sacra Ilio,

contra Príamo y contra su hueste por culpa de Alejandro [Paris],

que había humillado a las diosas cuando llegaron a su aprisco

y él se pronunció por la que le concedió la dolorosa lascivia.

El inicio hay que buscarlo en la boda entre la ninfa Tetis y Peleo, padres de Aquiles (de hecho, fue Tetis la que sumergió a Aquiles en el río Estigia para hacerlo inmortal, quedando sin mojarse el talón). Eris, diosa de la discordia, no había sido invitada y, molesta por ello, tramó un plan para vengarse y sembrar la discordia entre los invitados al banquete. Se personó en el convite y lanzó una manzana de oro, diciendo que habría de ser para la dama más hermosa. Tres diosas (Hera, Atenea y Afrodita) se disputaron la manzana y Zeus (padre de los dioses, el Júpiter de la mitología romana) intervino y decidió que fuera Paris, hijo de Príamo, rey de Troya, quien resolviera el conflicto. El elegido fue él porque vivía alejado del mundo y de las pasiones humanas y se presumía imparcial.

Cada una de las tres diosas intentó convencer al joven Paris de que ella era la más hermosa, prometiéndole toda suerte de bendiciones, llegando incluso al soborno. Así, Hera (Juno en la mitología romana, esposa de Zeus) le prometió todo el poder que pudiera desear;  Atenea, diosa de la inteligencia, la guerra y las artes, le ofreció la sabiduría y la posibilidad de vencer en todas las batallas; Afrodita (la venus romana) le ofreció el amor de la más bella mujer del mundo.

Escenas de ese juicio en la Historia del Arte hay muchísimas. Aquí tenéis una muestra.

Finalmente, Paris decidió que la manzana de oro sería para Afrodita. Y en el pecho de Paris empezó a brotar el amor por la bella Helena, esposa del rey de Esparta, Menelao. Cuando Paris pasó por esas tierras y permanecer una noche en palacio, raptó a Helena y se la llevó a Troya. Menelao, enfurecido, convocó a otros reyes aqueos (sinónimo de griegos) como Agamenón, su hermano; Odiseo, rey de Ítaca; Aquiles, hijo de Peleo, rey de los mirmidones, entre otros, para ir a recuperar a Helena. Y así dio comienzo la guerra de Troya, que duró diez años (se piensa que en el siglo XIII o XII a. C.). Los mismos años que tardó Odiseo/Ulises en regresar a Ítaca. Aunque esa ya es otra historia...

lunes, 24 de septiembre de 2012

Anagramas 2

Seguimos con los anagramas, pero animaos a solucionarlos. Os dejo otra lista de veinte anagramas, todos ellos de siete letras. ¡Vamos! ¡Suerte!

1. IONDEBU

2. LICDEZA

3. LAECEBD

4. FITECID

5. CORETSU

6. ELAFSET

7. AILXAGA

8. LIGOGAN

9. TIABTHA

10. LOMAZPI

11. ASTELMA

12. INVRAAN

13. EZRIJOA

14. DLIEZAP

15. EIRPARC

16. OPEILSE

17. TLUJERA

18. SAGVOTA

19. ROZCOIC

20. IRURODZ

Un crucigrama escolar

Hola, chicas y chicos. Para hoy os he preparado un crucigrama. Las definiciones están debajo de la cuadrícula. Para responder, lo más cómodo es que imprimáis la página e intentéis solucionarlo (es muy fácil). Luego escribís la solución en forma de comentario (por ejemplo poniendo 1: CASA, 2: COCHE, etc.) y ya está.

Aviso: me encantan los crucigramas. No será el último que hagamos. Si participáis, el siguiente podrá ser sobre los contenidos del Tema 1.

viernes, 21 de septiembre de 2012

Cantar de los Cantares

Dentro del primer bloque del temario de Literatura Universal tenemos «La Biblia: libros y repercusión literaria». En el libro de texto nos aparece un breve fragmento de uno de los libros bíblicos, el Cantar de los Cantares, concretamente del capítulo 2, versículos 9-13. Como ya sabéis, ese libro pertenece al Antiguo Testamento y lo englobamos dentro de la temática poético-amorosa. (De hecho, el pequeño libro de Cantar de los cantares podríamos entenderlo simplemente como un canto al amor pasional si no estuviera enmarcado dentro de la Biblia.)

La autoría de ese libro se atribuye tradicionalmente al rey Salomón (tercer y último monarca de Israel, que reinó en el siglo X a.C.)

Pero no debemos olvidar que el Cantar de los Cantares pertenece al corpus de la Biblia hebrea. En esa Biblia se ubica entre los libros de Rut y Eclesiastés. En la Biblia cristiana protestante está colocado entre Eclesiastés e Isaías, y en la Biblia cristiana católica entre Eclesiastés y Sabiduría.

Su contenido no es más que una alegoría de la relación entre el alma humana y Dios, aunque hemos de reconocer que otros historiadores y estudiosos aceptan el significado literal de la obra. Es un libro muy breve, de ocho capítulos. Podéis leerlo en cualquier Biblia que tengáis por casa o desde esta web.

Y ahora os dejo con el «Cántico espiritual», obra del poeta místico español San Juan de la Cruz (1542-1591), inspirado en el Cantar de los Cantares. Este poema está compuesto por 39 liras (estrofa de cinco versos con rima consonante aBabB). San Juan de la Cruz estaba recluido en el monasterio carmelita de Toledo, en un calabozo sin ningún medio de escritura, cuando compuso y memorizó casi todo este hermoso poema. Al final del texto os he puesto una canción de Amancio Prada, inspirada en estos versos.

Cántico espiritual

Canciones entre el alma y el esposo

Esposa:

¿Adónde te escondiste,
amado, y me dejaste con gemido?
Como el ciervo huiste,
habiéndome herido;
salí tras ti, clamando, y eras ido.

Pastores, los que fuerdes
allá, por las majadas, al otero,
si por ventura vierdes
aquél que yo más quiero,
decidle que adolezco, peno y muero.

Buscando mis amores,
iré por esos montes y riberas;
ni cogeré las flores,
ni temeré las fieras,
y pasaré los fuertes y fronteras.

(Pregunta a las Criaturas)

¡Oh bosques y espesuras,
plantadas por la mano del amado!
¡Oh prado de verduras,
de flores esmaltado,
decid si por vosotros ha pasado!

(Respuesta de las Criaturas)

Mil gracias derramando,
pasó por estos sotos con presura,
y yéndolos mirando,
con sola su figura
vestidos los dejó de hermosura.

Esposa:

¡Ay, quién podrá sanarme!
Acaba de entregarte ya de vero;
no quieras enviarme
de hoy más ya mensajero,
que no saben decirme lo que quiero.

Y todos cantos vagan,
de ti me van mil gracias refiriendo.
Y todos más me llagan,
y déjame muriendo
un no sé qué que quedan balbuciendo.

Mas ¿cómo perseveras,
oh vida, no viviendo donde vives,
y haciendo, porque mueras,
las flechas que recibes,
de lo que del amado en ti concibes?

¿Por qué, pues has llagado
aqueste corazón, no le sanaste?
Y pues me le has robado,
¿por qué así le dejaste,
y no tomas el robo que robaste?

Apaga mis enojos,
pues que ninguno basta a deshacellos,
y véante mis ojos,
pues eres lumbre dellos,
y sólo para ti quiero tenellos.

¡Oh cristalina fuente,
si en esos tus semblantes plateados,
formases de repente
los ojos deseados,
que tengo en mis entrañas dibujados!

¡Apártalos, amado,
que voy de vuelo!

Esposo:

Vuélvete, paloma,
que el ciervo vulnerado
por el otero asoma,
al aire de tu vuelo, y fresco toma.

Esposa:

¡Mi amado, las montañas,
los valles solitarios nemorosos,
las ínsulas extrañas,
los ríos sonorosos,
el silbo de los aires amorosos;

la noche sosegada,
en par de los levantes de la aurora,
la música callada,
la soledad sonora,
la cena que recrea y enamora;

nuestro lecho florido,
de cuevas de leones enlazado,
en púrpura tendido,
de paz edificado,
de mil escudos de oro coronado!

A zaga de tu huella,
las jóvenes discurran al camino;
al toque de centella,
al adobado vino,
emisiones de bálsamo divino.

En la interior bodega
de mi amado bebí, y cuando salía,
por toda aquesta vega,
ya cosa no sabía
y el ganado perdí que antes seguía.

Allí me dio su pecho,
allí me enseñó ciencia muy sabrosa,
y yo le di de hecho
a mí, sin dejar cosa;
allí le prometí de ser su esposa.

Mi alma se ha empleado,
y todo mi caudal, en su servicio;
ya no guardo ganado,
ni ya tengo otro oficio,
que ya sólo en amar es mi ejercicio.

Pues ya si en el ejido
de hoy más no fuere vista ni hallada,
diréis que me he perdido;
que andando enamorada,
me hice perdidiza, y fui ganada.

De flores y esmeraldas,
en las frescas mañanas escogidas,
haremos las guirnaldas
en tu amor florecidas,
y en un cabello mío entretejidas:

en sólo aquel cabello
que en mi cuello volar consideraste;
mirástele en mi cuello,
y en él preso quedaste,
y en uno de mis ojos te llagaste.

Cuando tú me mirabas,
tu gracia en mí tus ojos imprimían;
por eso me adamabas,
y en eso merecían
los míos adorar lo que en ti vían.

No quieras despreciarme,
que si color moreno en mí hallaste,
ya bien puedes mirarme,
después que me miraste,
que gracia y hermosura en mí dejaste.

Cogednos las raposas,
que está ya florecida nuestra viña,
en tanto que de rosas
hacemos una piña,
y no parezca nadie en la montiña.

Deténte, cierzo muerto;
ven, austro, que recuerdas los amores,
aspira por mi huerto,
y corran sus olores,
y pacerá el amado entre las flores.

Esposo:

Entrado se ha la esposa
en el ameno huerto deseado,
y a su sabor reposa,
el cuello reclinado
sobres los dulces brazos del amado.

Debajo del manzano,
allí conmigo fuiste desposada,
allí te di al mano,
y fuiste reparada
donde tu madre fuera violada.

O vos, aves ligeras,
leones, ciervos, gamos saltadores,
montes, valles, riberas,
aguas, aires, ardores
y miedos de las noches veladores,

por las amenas liras
y canto de serenas os conjuro
que cesen vuestras iras
y no toquéis al muro,
porque la esposa duerma más seguro.

Esposa:

Oh ninfas de Judea,
en tanto que en las flores y rosales
el ámbar perfumea,
morá en los arrabales,
y no queráis tocar nuestros umbrales.

Escóndete, carillo,
y mira con tu haz a las montañas,
y no quieras decillo;
mas mira las compañas
de la que va por ínsulas extrañas.

Esposo:

La blanca palomica
al arca con el ramo se ha tornado,
y ya la tortolica
al socio deseado
en las riberas verdes ha hallado.

En soledad vivía,
y en soledad he puesto ya su nido,
y en soledad la guía
a solas su querido,
también en soledad de amor herido.

Esposa:

Gocémonos, amado,
y vámonos a ver en tu hermosura
al monte o al collado
do mana el agua pura;
entremos más adentro en la espesura.

Y luego a las subidas
cavernas de la piedra nos iremos,
que están bien escondidas,
y allí nos entraremos,
y el mosto de granadas gustaremos.

Allí me mostrarías
aquello que mi alma pretendía,
y luego me darías
allí tú, vida mía,
aquello que me diste el otro día:

el aspirar del aire,
el canto de la dulce filomena,
el soto y su donaire,
en la noche serena
con llama que consume y no da pena;

que nadie lo miraba,
Aminadab tampoco parecía,
y el cerco sosegaba,
y la caballería
a vista de las aguas descendía.

jueves, 20 de septiembre de 2012

Ortografía de por qué, porque, por que y porqué

Es un error recurrente. A veces, al escribir, tenemos esa duda. ¿Se escribe por qué, separado y con tilde, o porque, todo junto y sin tilde? ¿Escribo porqué, junto y con tilde, o por que, separado y sin tilde?

Es una falta de ortografía que aparece frecuentemente pero que es muy fácil de eliminar si atendemos a los siguientes aspectos.

Tenemos cuatro posibilidades: por quéporquéporquepor que.

POR QUÉ: Lo escribimos así, separado y con tilde, cuando tiene valor interrogativo o exclamativo¿Por qué has venido tan tarde? ¡Por qué me pasan siempre cosas malas! Pero OJO, que tenga valor interrogativo o exclamativo no significa que siempre tenga que ir entre signos de interrogación o exclamación. Fíjate en estas oraciones: La profesora me preguntó por qué llegué tardeÁngel no sabe por qué está triste su gato. Aquí hay un valor interrogativo, pero no tenemos signos de interrogación y lo escribimos separado y con tilde. Igualmente, ponemos tilde en los adverbios interrogativos o exclamativos aunque no haya signos de interrogación o exclamación, como por ejemplo en: Mi madre preguntó cuándo volveríaYa sabemos cómo vamos a pintar mi habitación.


PORQUE: Cuando se escribe junto y sin tilde es una conjunción subordinante, de tipo causal (y también final). Expresa la causa o la razón de la acción designada por el verbo principal, o inicia la respuesta a una pregunta encabezada por por quéMe tienen envidia porque fui la única que aprobó; [¿Por qué no quieres venir?] Porque no me apetece.

POR QUE: Si aparece separado y sin tilde estamos ante una combinación entre la preposición por y la conjunción que. Se identifica fácilmente porque puede sustituirse por el cualla cuallos cualeslas cualesLa verdadera razón por que quieres quedarte es Miguel ( = La verdadera razón por la que quieres quedarte es Miguel). También se escribe de esta forma cuando la preposición por es exigida por un verbo, un sustantivo o un adjetivo: No había que preocuparse por que la invadiera la nostalgiaExpresó su interés por que el decreto se llevara a cabo.

PORQUÉ: Cuando se escribe junto y con tilde es un sustantivo masculino que significa «causa o motivo». Como es un sustantivo, admite plural y singular y se usa precedido de determinante: Me preguntó el porqué de mi felicidadNo alcanzo a comprender los porqués de su enfado.

Algunos nos parecerán más complicados de identificar que otros, pero lo principal es fijarse bien en lo que uno escribe, atender muy bien a las reglas y normas ortográficas y repasar varias veces cuando terminamos un ejercicio o un examen. Ante cualquier duda, ya sabéis dónde y cómo encontrarme. ;-)

Ah, se me olvidaba. Como habéis podido comprobar, las MAYÚSCULAS llevan tilde, siempre que la necesiten, claro.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

"Prodigiosos mirmidones"

Acaba de publicarse en la editorial Capitán Swing el manual Prodigiosos mirmidones. Antología y apología del dandismo, coordinado por Leticia García y Carlos Primo.



Los mirmidones eran un antiguo pueblo de la mitología griega situado en la parte central de Grecia (la zona se conoce como Tesalia). En la Ilíada de Homero (que estudiaremos en Literatura Universal) aparecen como un pueblo valiente, de guerreros muy capaces, que lucharon en la Guerra de Troya bajo las órdenes de Aquiles. Descendientes del rey Mirmidón, que a su vez descendía del dios Zeus, los mirmidones (término que en griego significa hormigas) reciben ese nombre de un mito: para conquistar a la bella princesa que engendraría después al futuro rey Mirmidón, Zeus se metamorfoseó en una hormiga. Esta leyenda mitológica, con algunas variantes, aparece también en Las metamorfosis de Ovidio (libro que también estudiaremos en la asignatura). Así nos lo relata el poeta romano Ovidio:
                                                        Salgo, y hombres como lo que

en las imágenes de mi sueño me había parecido ver, iguales

los contemplo y reconozco uno por uno; se acerca y me saludan

como su rey. Cumplo mis votos a Júpiter, reparto la ciudad

entre mis nuevos súbditos y los campos vacíos de sus antiguas labriegas

y los llamo Mirmídones sin privar al nombre de su origen.

Ya has visto sus cuerpos; el carácter que antes tenían,

lo tienen también ahora; es una raza ahorrativa, infatigable,

tenaz al aprovisionarse y que guarda sus provisiones.

Ovidio, Metamorfosis, libro VII versos 649-657

Actualmente, cuando hablamos de dandisdandismo enseguida nos vienen imágenes del pasado: caballeros elegantes de otra época acudiendo a salones culturales para entablar larguísimas conversaciones sobre poesía o pintura, vestidos con sombreros de copa, relojes de bolsillo y siempre siempre llevando el mentón bien alto.

Oscar Wilde, Charles Baudelaire, Coco Chanel, Tom Wolfe..., escritores o diseñadores de distintas épocas que representan el dandismo. ¿En la actualidad existen todavía los dandis?

El libro Prodigiosos mirmidones recoge la definición que el propio Baudelaire (en Literatura Universal de 2º de Bachillerato leeremos su poemario simbolista Las flores del mal) empleó en 1853 para describir a los integrantes de una curiosa secta que poco a poco fue calando en la alta sociedad del París de la época. Los inicios del dandismo.

Volviendo a la pregunta anterior, ¿hay dandis en pleno siglo XXI? Estas son algunas de las características para reconocerlos:

  • El dandi es el último resplandor de heroísmo en decadencia, como escribió Baudelaire.

  • Una forma de protesta, bella aunque chocante. No quiere gustar, sino disgustar o sorprender o epatar. Resultar distinto.

  • Una elegancia distinta. Usa la elegancia y al mismo tiempo la rompe. Esmera su vestuario, pero no solo admite, sino que precisa de disonancias. Corsarios de guante amarillo, que diría Balzac.

  • No es solo ropa y adorno, sino ideología. Manera de vivir, de estar a la contra. Imagen pensante.

  • El diablo con apariencia de hermoso adolescente, naturalmente melancólico.

  • El cruce inextricable con el esplín (spleen, acordaos de esta palabra, la usaremos muchísimo cuando lleguemos a Baudelaire), el hastío y la añoranza.

  • Buscan el aplauso de la minoría –a la que buscan escandalizar– y el desdén de la mayoría  –su enemigo mortal–.

  • No quiere pertenecer a ninguna clase social –a la alta tampoco–; aspira a ser un desclasado, lo que le permitirá más libremente lucir su extraña rebeldía, que en ocasiones hasta parece ir contra la vida misma porque aún es más dandi la mera ambigüedad.

  • La teatralidad. Escapar de la decepcionante realidad, estetizando la cotidianidad y convirtiendo la vida en una cuidada autopercepción.

  • El dandismo es una distinción más metafísica que social, como dijo Barthes.

  • Cultiva el detalle y la anécdota en detrimento de los grandes valores. Se aferra a un mundo perdido a través de pequeños gestos y detalles efímeros. Esta fugacidad lo convierte en un nuevo estoico.

  • Un aristócrata individual.

  • Fiel a sí mismo.

  • Se le atribuyen todos los pecados, las perversidades y todos los desvíos imaginables, incluidos los sexuales.


Si queréis comentar (que debéis comentar, para no convertir el blog en un desierto), ya sabéis: escribid en comentarios.

martes, 18 de septiembre de 2012

Poema "La primavera"

Durante el curso pasado, los alumnos de 1º de ESO A y B del Colegio «El Valle» se presentaron al concurso literario que organiza el Grupo Leo de Alicante.

Este grupo de profesores y maestros de Lengua, de amantes de los libros en general, se ha encargado de potenciar y transmitir la cultura de las letras desde hace casi treinta años a varias generaciones de estudiantes de nuestra provincia.

Este concurso en concreto, que abarca desde la Educación Infantil hasta Secundaria, ha supuesto, en algunos casos, un trampolín para escritores que, aunque jóvenes todavía, dan ahora sus primeros pasos en el mundo literario.

Como os decía, el año pasado se presentaron las dos clases de 1º de ESO al XVII Concurso Grupo Leo, resultando premiada Andrea Rosell en la quinta categoría (que engloba 1º y 2º de ESO) y siendo finalistas las compañeras Valeria Esparza, Andrea Pagán y Verónica Ruiz.

Por supuesto, este año volveremos a presentarnos, así que afilad los lápices y los colores y poned a punto la imaginación. Mientras tanto, podéis leer el trabajo que presentó Valeria Esparza, que este año cursa 2º de ESO.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Anagramas

Esto es lo que nos dice la RAE acerca de los anagramas: «Transposición de las letras de una palabra o sentencia, de la que resulta otra palabra o sentencia distinta».

Quizá habéis jugado al Scrabble, un juego de mesa de palabras encadenadas que salió a la venta a finales de los años 40 del pasado siglo.



La mecánica es sencilla: el Scrabble se juega entre dos, tres o cuatro jugadores, en un tablero de 15x15. Cada uno dispone de un atril en el que va colocando de siete en siete las distintas letras que componen el juego. En la versión española hay un total de 100 fichas (98 marcadas con letras y dos fichas en blanco que sirven como comodines). Cada contrincante, en su turno, debe construir una palabra con el máximo número de letras posible, cruzándola con otra palabra que se encuentre ya en el tablero. Es decir, debe hacer anagramas.

Seguro que, aunque no hayáis jugado nunca al Scrabble, sí conocéis Apalabrados o Wordfeud: son juegos para móvil, tableta u ordenador que siguen esa misma mecánica.

Pues bien, os propongo encontrar anagramas. Por ejemplo: con ONXE se puede formar nexo; con EOVNIC formaríamos vecino; con DHIUN, hindú.

Ya que hemos dicho que en el Scrabble (o el Apalabrados, o el Wordfeud) el jugador dispone de siete letras, ¿seríais capaces de encontrar la palabra que se esconde detrás de los siguientes anagramas? (Podéis responder en comentarios, proponiendo otros anagramas si queréis. Ante cualquier duda sobre cómo participar en el blog consultad el espacio Normas de uso.)

1. JOMLEPE

2. EJLANET

3. INGOCOE

4. AMDEUOQ

5. ANTEPDE

6. EBTIMAN

7. DRECAVA

8. LIGASIE

9. LEROSUC

10. ALOCABA

11. ABRETAN

12. NEUTREG

13. UNOMELV

14. AELPUSE

15. TIJUAES

16. TRIULES

17. OLNAGIM

18. RIGATFA

19. EMODABN

20. BALOSPI

Nuestra historia de verano

Hoy han empezado las clases en Secundaria. Muchos ya os conocíais de Primaria; otros sois nuevos. En clase nos hemos presentado; sin embargo, me gustaría que me contarais más cosas. Por ejemplo: ahora que ya parece tan lejano..., ¿por qué no hablamos del verano pasado?

Durante el verano ocurren viajes, experiencias, se conocen otras personas, se viven situaciones cómicas, peligrosas, divertidas... Aunque no hayas salido de Alicante de vacaciones, seguro que te habrá pasado algo «diferente» que merezca la pena relatar.

Venga, anímate. Escribe tu historia de verano en los comentarios (ya sabes, para que el comentario se publique debes poner tu nombre y apellidos y tu curso), cuidando la expresión y la ortografía. No hace falta que sea un relato larguísimo, con diez o doce líneas basta. Por eso tienes que ir al grano y contarlo de modo que resulte atractivo. Como si fuera un cuento. Es más, ¿qué tal si empiezas de esta forma?: «Este verano me ocurrió algo sorprendente...».

Para inspirarnos, os dejo una canción muy divertida: «Mediterráneo», de Los Rebeldes.


¿Hacia dónde va la literatura?

El pasado viernes, el diario El País publicaba un artículo acerca del Film Festival 140 caracteres, un certamen que nació en Bogotá fundiendo Twitter y cine. La idea es que se tome uno de los miles de tuits que invaden esa red social diariamente y se cree un cortometraje muy corto (no más de 140 segundos) con una historia.

Os dejo con uno de ellos:







Como se aprecia, el ritmo es vertiginoso. Otros, sin embargo, llevan una reflexión implícita. Como este:







Sea como fuere, la literatura (y por literatura también entendemos el guión cinematográfico) está evolucionando muy deprisa: libros electrónicos, tabletas digitales... Ya no hace falta cargar con un libro para leer; lo podemos tener en el móvil e ir leyéndolo poco a poco. La forma de escribir, obviamente, también ha cambiado. Lejos quedan las máquinas de escribir... Es más, desde hace décadas, y potenciado por la revolución social de Internet al alcance de todos, se ha puesto de moda la escritura hiperbreve: relatos muy muy cortos, tan cortos como pueden llegar a ser los mensajes de la red social Twitter o los SMS.

¿Nos animamos intentando crear cuentos hiperbreves? Máximo cincuenta palabras (unas cuatro líneas en Word). Puedes escribir tus relatos (originales, por supuesto) en forma de comentario (en las Normas de uso puedes ver cómo emplear los comentarios). Puedes narrar una historia o lanzar una reflexión. Pero, recuerda, no puedes enrollarte demasiado, porque ¡solo dispones de cincuenta palabras!

Pierre Menard, autor del Quijote

Como introducción a la materia, estamos trabajando este relato-ensayo de Jorge Luis Borges (de su libro Ficciones, publicado en 1941). Podéis leerlo íntegro aquí.

Aunque no sea un texto excesivamente largo, es muy denso, y nos viene a señalar, desde la óptica del crítico literario, cómo un mismo texto (exactamente igual, con las mismas palabras y las mismas comas y puntos) puede significar cosas completamente distintas según el tiempo en que se lea. Quizá, incluso, según la persona que lo lea...

Eso es lo que vamos a hacer nosotros en la asignatura. Leeremos los originales y sabremos qué quería decir el autor cuando los escribió, pero sin olvidarnos de la perspectiva que nos concede el tiempo transcurrido. Por ello son obras inmortales.


De ese mismo libro de Borges hay otro relato que me gusta mucho: «Las ruinas circulares». En esta página tenéis el texto completo. En «Las ruinas circulares», un hombre decide crear otro hombre mediante la fuerza de sus sueños. Al final, como el título del relato indica, parece que ha entrado en un bucle...


Como anécdota, hacia la primavera publiqué en el Diario Información un artículo en el que se mencionaba ese relato.


Ahora os dejo hablar a vosotros.


¿Qué os ha parecido «Las ruinas circulares»? ¿Tan fuerte es nuestra imaginación? ¿Tanto podemos hacer a través de nuestros sueños o deseos? ¿Qué pensáis?

¿Qué es literatura?

Como hemos visto en clase esta mañana, estas definiciones recogen lo que entendemos por «literatura». No obstante, y al igual que podemos ver una obra literaria desde múltiples perspectivas, el concepto literatura puede tener distintas connotaciones. Vuelve a leerlas y expresa tu opinión personal al respecto en un comentario (si tienes dudas acerca de cómo comentar visita el espacio Normas de uso).

1. Arte de la palabra, por oposición a otras artes (la pintura, la música, etc.). Su sentido «fuerte» en la actualidad, que nació a finales del siglo XVIII y se consagra con la obra de Madame de Staël (Acerca de la literatura considerada en sus relaciones con las instituciones sociales, 1800).

2. Arte de la palabra, por oposición a usos funcionales del lenguaje. Corresponde al deslinde entre escritos de creación y otros escritos que reclaman un estatuto aparte como científicos con la irrupción de las ciencias positivas a finales del siglo XVIII.

3. Arte de la expresión intelectual. Se trata de una acepción que se va fijando a lo largo del siglo XVIII y que pierde terreno al final para ser sustituida por la mencionada en el apartado 2.

4. Cultura del hombre de letras o ciencia en general a tenor de su significación etimológica. Es la acepción dominante en el siglo XVIII.

5. Conjunto de la producción de obras literarias en los sentidos 1 y 2. Conjunto de la producción literaria de una época, de un país, de una región: literatura española, literatura americana

6. Categoría propia de las obras que pertenecen a un género o temática, estilo o movimiento (literatura picaresca, literatura mística, literatura barroca, literatura vanguardista…).

7. Asignatura de los planes de estudio que versa sobre las acepciones 1, 2 y derivadas.

8. Institución social que comprende una carrera profesional, una titulación universitaria y una industria establecida, además de unos contenidos de estudios que versan sobre las acepciones 1, 2 y derivadas.